lunes, 3 de agosto de 2009

Mexicanos al grito de guerra...

Nuevamente las propuestas que prometen dar solución a todos y cada uno de los grandes males que nos afectan cotidianamente son presentadas ante nuestros ojos y oídos a través de los medios masivos de comunicación, sumándose ahora también los foros sociales en internet. Las promesas están encaminadas a brindar atención urgente a temas que con sólo nombrarlos provocan controversia por sí mismos. El aborto, la pena de muerte, la legalización de las drogas, el desempleo, la delincuencia y la educación, entre algunos más. Todos, sin duda perfilan nuestra realidad, pero la política actual está aún muy lejos de encarar las posibles soluciones. Por obligatoriedad los resultados serían en definitiva más favorecedores si optáramos por intervenir quirúrgicamente el mal como tal y no simplemente colocar una bandita que disfrace el malestar.

Así en lugar de politizar el asunto del aborto sería conveniente educar a los jóvenes para que practiquen su sexualidad con libertad y responsabilidad, con el conocimiento veraz y oportuno que les permita decidir bajo que términos están dispuestos a ejercer sus derechos y obligaciones. Fomentar una cultura de respeto hacía su cuerpo y hacía su salud para que el día que se sientan tentados a consumir drogas, sean capaces de desistir de hacerlo. Definitivamente es indispensable mantener consolidada a la familia como parte fundamental del desarrollo de la sociedad, estamos obligados a involucrarnos totalmente en la educación de nuestros hijos, a participar en su perfeccionamiento y por consecuencia directa a la formación de individuos que hagan de éste país una nación donde se dé aforo a la verdadera democracia y al compromiso ciudadano de actuar, exigir y mostrar resultados.

Mención aparte merece el escrutar nuevos mecanismos de acción para elevar el nivel de la educación que se brinda a los jóvenes y niños. De acuerdo con el Primer Estudio Internacional sobre Enseñanza y Aprendizaje realizado en 23 países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, el nuestro registra un nivel de absentismo por parte de los docentes del 70% -el peor de todas las naciones donde se llevó a cabo el sondeo- además de su nula preparación como maestros. Por lo que si los responsables de formar profesionales altamente preparados se muestran como incompetentes ¿qué rumbo tomará nuestro país con los siguientes funcionarios públicos, políticos y empresarios medianamente educados? Por ello las promesas de nuestros futuros legisladores se enfocan en ofrecer vales canjeables por medicamentos y no por dar fin a la corrupción existente en las instituciones de seguridad social.
Ahora bien, el anular nuestro voto no es hacernos escuchar, existe otra manera que es involucrándonos, todos los legisladores federales están obligados a establecer una oficina de atención, acerquémonos y exijámosles cumplir sus promesas.

En días pasados me llamaron belicoso por no decir conflictivo al presentar una queja ante un organismo público. Bien, aclaro que esta es mi manera de exigir mis derechos como ciudadano ya que creo que las grandes revoluciones llegan con las acciones que permiten dar paso a los pequeños cambios.

Nos leemos luego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario